miércoles, 1 de agosto de 2012

El fin del mundo es como una red llena de peces



“El fin del mundo es como una red llena de peces” (Mt 13, 47-53). La cotidiana escena de pescadores que tienden las redes en el mar para pescar, sirve en este caso a Jesús para describir las asombrosas realidades de la vida ultra-terrena.
En la escena de la pesca, cada elemento representa una realidad sobrenatural: el mar es el mundo y la historia humanos; los peces, son los hombres; la pesca, el Día del Juicio Final; la red en la que los peces son subidos a la barca, es Cristo; la barca es la Iglesia; los pescadores, los ángeles que intervendrán en ese momento, separando a los buenos de los malos; los peces en buen estado, son las almas en las que Dios encontrará, al fin de sus días, gracia, amor y bondad hacia el prójimo, y serán consideradas dignas de entrar en el Reino de los cielos. Por el contrario, los peces en descomposición, aquellos que en una jornada de pesca deben ser desechados porque no sirven para la alimentación y el comercio, representan a aquellos que, en el momento del juicio particular, es decir, en el momento de la muerte, fueron encontrados privados de la gracia de Dios, y por lo tanto, sin bondad ni amor hacia Dios y hacia el prójimo en el corazón, y de la misma manera a como los peces que no sirven son arrojados fuera de la barca, así las almas sin gracia y sin amor, serán arrojadas al infierno.
“El fin del mundo es como una red llena de peces”. Para quien quiera saber cuál será su destino eterno, sólo tiene que buscar, en su corazón, cómo vive el primer mandamiento, el más importante de todos, el que abre las puertas del cielo si se lo cumple, o las puertas del infierno si no se los cumple.
Aquel que albergue en su corazón resentimiento y enojo, y sea incapaz de perdonar, y aquel que no refrene su lengua –no vale nada la religión del que no refrena su lengua (Sant 1, 26)-, se encuentra, desde ya, entre aquellos que serán considerados indignos del Reino de los cielos.

1 comentario:

  1. Me ha encantado tu blog. Te invito a que ojees el mío:
    http://www.creoendios.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar